Torreblasa es Torrevieja en argot Aranluquero, o mejor dicho, argot Gatuno, porque lo de Blasa es más suyo que mío (1). Este verano pasamos una semana allí, nuestra tercera estancia, y como siempre que nos meten a este ser humano mutante y a mí juntos las veinticuatro horas del día y sin nadie más con quien interaccionar, trajimos de vuelta unas cuantas paranoias. Haré un popurrí de las más sonadas de todos los tiempos:
El Ferrigno: Lou Ferigno, La Masa televisiva, protagonista de nuestra primera visita a Torrevieja. Acababan de estrenar Hulk y toda la ciudad estaba empapelada de carteles del Gran Circo Italiano (creo que era) con el tío Hulk en primer plano, pero no el de la peli, no, el Ferrigno. Empezamos con la coña de qué pena de hombre, con lo que era y ahora ahi le tienes, en el circo... pero lo mejor fué cuando al año siguiente llegamos a Torrevieja y vimos por todas partes camiones y carteles de MASA, una constructora. Llegamos a la conclusión de que el Ferrigno se había cansado de ir de acá para allá y había montado una empresa. Lo curioso es que Torrevieja está viviendo un boom inmoviliario, y este año, desde nuestra terraza, podíamos contar no menos de quince grúas, muchas de las cuales tenían ese fatídico nombre... Joer con el Ferrigno... (2)
El Galli: Este es de nuevo cuño. El primer día que llegamos a Torrevieja este año escuchamos cantar a un gallo (no kikirikí, sino más bien kokorikó, que es más realista) como a las cinco de la tarde. Gato me miró y me dijo '¿Ya es por la mañana? Que corto se me ha hecho...' A los diez segundos, otra vez canta el animal. 'Joer, otro día, a este paso se nos van a pasar las vacaciones...' La tercera vez que cantó, al minuto siguiente, ya ni nos inmutamos. Ni la cuarta, ni la quinta. Esa noche cantó unas siete veces, el puñetero. Yo no sé si me dormí y lo soñé, porque Gato dice que no lo oyó, pero desde mi punto de vista el bicho estaba canta que te canta. Llegué a pensar que era una banda organizada de Torrevejenses capullos que hacía el gallo para joder el sueño a los turistas. Curiosamente, al tercer día no lo oimos más. Seguramente su dueño se lo cargó. Entonces empezamos a mitificarlo, a contar oscuras leyendas del Galli (3) y su heroica muerte, y desde entonces llamamos Galli al Kentucky Fried Chicken. No me pregunteis por qué.
The Jamacucus and the Furious: ¿Recordais esa petardada de película, The Fast and The Furious? Pertenece a un nuevo género chorra, el de carreritas de coches y tuneamientos (4). Bueno, pues nuestro piso (de mis suegros... sigh) da a una calle muy grande y muy recta que cruza toda Torrevieja desde el Carrefur al puerto, lo que es un trecho corto pero interesante (te lo haces en veinte minutos andando, por sierto, que Torrevieja es alargada) y los petaos de la vida aprovechan por las noches para hacer carreritas chungas. Estás durmiendote y WAOOOooo... ''hala, ahi va un petao' y WAOOOooo... 'ahí va otro'. En fin, pasan deprisa pero pasan. Los llamamos jamacucus porque es una manera de decir que van petaos, que les ha dado un jamacuco. The Jamacucus and the Furious.
Espía tu culpa: Cuando ves dibujos animados en catalán sin entender el idioma se abre ante tí un nuevo mundo de posibilidades insospechadas, dejas de estar restringido por el guión y empiezas a inventarte gilipolleces sin fin que casen con lo que estás viendo en la tele. Bueno, admito que cuando llevo ya tres o cuatro días allí y me concentro acabo entendiendolo, mal que bien, que tampoco es tan diferente del castellano, pero eso le quita la gracia a la cosa. Lo de la culpa vino de ver Sin Chan en semejantes condiciones. El niño amorfo empezó a bailotear meneando el culillo, como suele, y una cosa llevó a la otra. A partir de entonces, cuando uno de los dos comete una falta que exige ser reparada, el otro le espeta: '¡Espía tu culpa, mueve tu culillo!' Y el interfecto debe bailar como Sin Chan esté donde esté. Bueno, sin enseñar el culo, claro.
La canción del verano: Es muy típico que nos llevemos la Play Station 2 de vacaciones, para nosotros es como una tradición, habida cuenta que nos permite alquilar juegos y pasarnos las tardes encerrados en casa dale que te pego a la maquinita, y así volver de la playa con un saludable color de piel blanco-tiza. En fin. Estas vacaciones sacamos varios juegos: Forbidden Syren (japonés de zombis, de irte escondiendo en la oscuridad, su poquito de miedo y dificil de narices), Harry Potter y el Prisionero de Azkaban (estaba bien, solo que nos atascamos con Ron y unos Hinkypunk de la puñeta), El Hobbit (muuuy mono... al principio dificultad parvularia, luego se pone mejor) y XIII, el meollo de la cuestión. Vereis, es un juego con guión en la linea El Caso Bourne, con un diseño muy original, tipo comic, en viñetas (¡viñetas!) que se juega en primera persona, con los dos mandos analógicos, que hasta que te acostumbras te mueres de asco. En fin, el juego es muy bueno, y debo decir con orgullo que yo le pillé el truco antes que Gato, pero cuando ya me había pasado un buen trecho y era muy tarde Gato dijo de apagar el aparato e irnos a dormir, y ¡toma! va y me lo apaga sin grabarlo. Rebote del bote y composición instantanea de canción del verano:
Estribillo:
"¡Tu me lo quitasteeee-e-e-e-e....!
¡Y ya lo teníaaaa-a-a-a-a....!
Estrofa:
Tu me lo quitaste, ese era mi juego
Casi lo tenía y hay que empezar de nuevo..."
Y así. Repitase el estribillo machaconamente, inventándose una estrofa nueva cada vez sobre la marcha, preferentemente que rime, aunque sea de refilón, y acompáñese de coreografía triste: puños en alto con movimientos circulares asimétricos de inspiración muñequito manga muy cabreado. Imprescindible emocionarse durante la interpretación, se puede mover el culillo al mismo tiempo, pero es opcional. En descargo de Gato diré que el hombre se puso las pilas y al día siguiente me pasó el juego entero del tirón hasta el punto en que yo lo tenía (bueno, me pasé yo la primera escena, que es un tiroteo un poco jodío, pero la escena del banco se la hizo toda él).
Aventuras Orientales: A Gato y a mi nos encantan las tiendas de todo a un euro. El primer año que llegamos no encontramos ni una regentada por chinos, la única tienda con chinos que vimos era una de productos orientales, donde las revistas estaban escritas con ideogramas y a cada occidental que entraba le miraban como a un marciano, lo cual acuñó la frase, ya célebre: "En Torrevieja los chinos son chinos, pero chinos chinos." Pues bien, ahora ya hay veinte duros (ahora hipereuros) de chinos como en el resto de españa. Bueno, solemos hacer el tour. Este año, curioseando en una caja de llaveros cutres, encontré un Snape de goma, totalmente pirata, que cuando lo aprietas suena Meek-Meek, me hizo gracia, se lo enseño a Gato y de repente noto una presencia a mi espalda: una niña china de tres añitos, que ni hablaba ni nada, persiguiendome para que se lo diera. Empecé a moverme por la tienda intentando despistarla, le di una Hermione cutre para que se entretuviera, pero no, ella quería mi Snape. Gato descojonándose, y yo con un moco con coletas que me llegaba a la altura de las rodillas, con los brazos en alto y haciendo 'eh, eh' que era todo su vocabulario. Las señoras de la tienda diciendome: "dale el muñeco a la niña" y yo: "No, que es mío". En fin, me lo compré (en realidad me lo compró Gato) pero la cria cada vez que entraba en esa tienda venía a donde yo estaba, biberón en mano, con su críptica súplica: eh, eh...
(1) Blasa es el nombre de la hiperenergética viejecilla de Cruz y Raya, que además de estar interpretada por el morenito, Jose, que Gato poco menos que lo venera, es, cómo todo lo que Cruz y Raya sacan del pueblo, de inspiración Tomellosera, cuna de Gato. Pues eso.
(2) Sinembargo el Gran Circo Italiano volvió a Torrevieja y en sus carteles se veía, en primer plano, a Spiderman, pero detrás en pequeñito volvía a estar el Ferrigno: será que tiene nostalgia de la carpa y hace un cameo... (mi cuñada fue a ver el espectáculo y dice que era muy triste y que Spiderman hacía el maricón, por cierto. Ah, y que el Ferrigno no estaba.)
(3) ¿Recordais la coña de 'Pecado Original' del Hombre Lobi, que era Aznar, por lo del Lobbi americano para que le concedieran la medalla del congreso? Que bueno. Decían 'Cuidadi, que viene el Hombre Lobi'... Nos estuvimos riendo una noche entera con la gilipollez.
(4) Desde Santurce a Bilbaoooo... voy con mi seat marbellaaa... le puesto unos neones... y lo he pintao de color peraaa... Mis atunitos, que ricos sooon... No, oye, que todo el que customice sus cositas merece mi respeto, pero hay cada petao por la vida de Dios que... en fin, ponerle al coche cosas que lo mejoren está bien, pero ponerle chorradas como neoncitos, bola de espejos en el techo y mueble bar... muy práctico, sobre todo para los controles de alcoholemia.
Escrito por Aranluc a las 21 de Septiembre 2004 a las 06:22 PM